El pasado 28 y 29 de julio, 27 personas se animaron a la salida anual al Pirineo organizada desde el Beti Gazte. Buen tiempo, ningún percance y fabuloso ambiente. He aquí la crónica escrita por los asistentes Bixente Igarzabal y Javier Arriola. Al final podréis observar numerosas fotografías de los parajes visitados.

«Excursión Beti Gazte, 28-29/07/2018.

El sábado después de llegar a Baños de Panticosa y comer el primer tentempié y darnos abundante crema, iniciamos la marcha a las 9:30h en dirección al embalse de Bachimaña, siguiendo siempre el GR-11. Una vez llegados al embalse y cerca del refugio nuevo de Bachimaña hicimos una parada para reponer fuerzas. A continuación nos dirigimos a los Ibones azules y poco a poco fuimos llegando al collado de Tebarray. Desde aquí un grupo iniciaba el ataque a las cimas de los Infiernos mientras otro grupo ascendía al pico Tebarray. Posterior reencuentro de todos los grupos en el refigio de Respomuso. A las 20:00h cena y a dormir. Maravillosa noche de luna.

La mañana del Domingo la iniciamos con un buen desayuno y la foto del grupo (falta Karlos), a continuación y después de llegar al Ibon de Campo Plano, el grupo más numeroso comenzó la ascensión al pico Cristales. El comentario general era que la subida fue mucho mejor que la bajada hasta el col de la Peyre de Saint-Martin y desde aquí una larga bajada hasta el autobús».

«Después de pasar la noche en el Refugio de Respumoso, que estaba completo este fin de semana, al igual que casi todos los días del verano los 27 componentes de la excursión desayunamos a las 6:30 y nos dividimos en 2 grupos: uno de 6 montañeros salimos con la idea de subir el Balaitous (3.144m) cima más alta de la zona Tena-Arrens mientras que el resto subirían el pico Cristales(2.889m), excelente mirador hacia la cima anteriormente mencionada. Ambos grupos nos reencontraríamos en el Plan D’Aste donde nos esperarían Enrique y Blanca con el autobús.

Debido a las especiales característas metereologicas en todo el Pirineo durante el pasado Otoño-Invierno-Primavera, muy generosas a nivel de nivosidad y al verano especialmente suave que hemos tenido hasta ahora, teníamos dudas respecto a la viabilidad del descenso previsto por la Gran Diagonal, zona muy sombría y especialmente peligrosa con nieve. Tras consultar con el guarda del refugio, este nos comentó que muy posiblemente el descenso estuviera ya en condiciones aceptables para realizarlo, pero que nos recomendaba una variente muy interesante: Descender por la Chimenea de las Neóus la cara Este de la montaña para enlazar después con el camino que baja del collado de La Peyre de Saint Martin. De esta forma a, ser un descenso más directo ganábamos un par de horas respecto al plan inicial.

Con esa hora salimos los 6 desde el refugio a las 7:15. La subida hasta la morrena del extinto glaciar de Latour la afrontamos sin novedad. En ese punto, comprobamos como este verano hay mucha más nieve de lo habitual y nos calzamos los crampones. Piolet en mano y no sin esfuerzo llegamos a la Brecha de Latour, donde nos los quitamos  y subimos sin problemas los dos escalones rocosos que nos condujeron a la placa donde están colocadas las clavijas que facilitan mucho la progresión en la pared.

Después de superar la última pendiente de nieve y tras 2h:40′ de marcha, coronamos la cima del Balaitous. La temperatura era agradable en la cima y encontramos un buen cobijo baja la cima al resguardo del viento que lo aprovechamos para almorzar y sacar las fotos de rigor. A continuación, iniciamos el destrepe por la chimenea de Las Neóus que fue bastante fácil hasta que a solo 20m de alcanzar la superficie del glaciar del mismo nombre nos encontramos con un estrechamiento muy vertical de la chimenea que nos impedía seguir bajando con seguridad así que sintiéndolo mucho, nos dimos la vuelta y volvimos a la cima. Tomamos el camino de descenso por la Gran Diagonal, que la encontramos en un estado mucho mejor de lo esperado y con mucha precaución pero sin problemas de especial relevancia la superamos hasta alcanzar el mítico Abrigo Michaud. Nuestra siguiente tarea era la de localizar el Col Noir(2.624m), collado que nos permitiría entrar en suelo francés.

Tras sondear varias opciones, finalmente Litri encontró el paso clave para continuar nuestro avance. Lo franqueamos y aprovechando la abundante nieve llegamos rápidamente hasta el refugio de Larribet. A partir de este punto nos cruzamos con muchos excursionistas que subían hasta el refugio y aceleramos la marcha en un terreno más fácil y horizontal para llegar al Plan D’Aste a las 15:05, después de 7h y 50′ de excursión. En total, hicimos 17,36 Km, con un desnivel positivo de 1.154m y un desnivel negativo de 1.736m.

Tras comprobar que el otro grupo había llegado también sin incidentes, nos limpiamos en las frías aguas del arroyo que bajaba cerca de la zona que habían escogido para comer y recuperamos fuerzas con una comida donde como suele ser habitual, no faltó de nada, Champagne y café incluidos. Allí estuvimos hasta las 17:00h, que fue cuando emprendimos el viaje de vuelta que nos dejó en Lesaka a las 19:45.

Y ahora toca preparar la excursión del año que viene…».